Carpocapsa: cómo controlar esta polilla en frutales de pepita

Actualizado 06/05/2024

La Carpocapsa o Cydia pomonella es un insecto perteneciente al grupo de las polillas que, en la actualidad, constituye la principal plaga de algunos cultivos importantes como son: el manzano, el peral, el nogal y el membrillero. Se la conoce también como polilla del manzano y produce daños irreversibles sobre la fruta, puesto que las larvas se alimentan de su interior, creando galerías que pueden llegar hasta las semillas.

Carpocapsa: cómo controlar esta polilla en frutales de pepita

La Carpocapsa, también conocida como Cydia pomonella, es una polilla perteneciente a la familia Tortricidae que representa una amenaza significativa para cultivos importantes como el manzano, el peral, el nogal y el membrillero. Esta plaga causa daños irreversibles en la fruta, ya que las larvas se alimentan del interior de los frutos, creando galerías que pueden llegar hasta las semillas. A continuación, exploramos cómo controlar esta plaga de manera efectiva y sostenible.

¿Qué es la Carpocapsa o polilla del manzano?

La Carpocapsa (Cydia pomonella) en sus primeras etapas es una pequeña polilla, pero al transformarse en adulto se convierte en una mariposa que tiene una longitud de entre 15 y 22 mm. Por lo general, el tamaño de los machos es más pequeño que el de las hembras.

El problema para los cultivos lo constituyen las larvas, que recién nacidas apenas miden 1,4 mm y son de color blanco, con la cabeza negra y tienen una gran movilidad, por lo que puede desplazarse con rapidez hacia el fruto, penetrar en los mismos e irse alimentando de su interior. En el momento de máximo desarrollo, la larva puede llegar a medir 20 mm.

Ciclo biológico de la Carpocapsa

La Carpocapsa tiene una media de 3 generaciones al año. Pasa el invierno en estado de oruga y suele localizarse en las ranuras del tronco y las ramas de los árboles. En el momento en que las condiciones son las apropiadas, normalmente en el mes de marzo, la oruga se convierte en crisálida. Esta etapa suele durar unos 20-30 días, dependiendo de las condiciones climáticas, y a partir de la segunda quincena de abril se inician los vuelos en los adultos. La primera y segunda generación de Carpocapsa ocurren en primavera en nuestras condiciones climáticas, mientras que la tercera ya es en verano (julio o agosto, según zonas).

Daños en los Frutales

Como hemos comentado, el peligro de la Carpocapsa se encuentra en las larvas, que son las que dañan los frutos de forma irreversible, pudiendo hacer perder la totalidad de la cosecha.

Los síntomas se hacen visibles cuando las larvas penetran en los frutos, ya que dejan un orificio rodeado de un halo rojizo y una especie de serrín en la entrada. Este es pequeño y claro cuando solo hace unos días que la larva ha penetrado en el fruto, haciéndose más voluminoso y oscuro a medida que pasan los días y la larva se desarrolla. En ocasiones observamos la caída prematura de los frutos dañados.

Estrategias de Control para Carpocapsa

El control de esta plaga es difícil cuando las poblaciones son muy grandes, por lo que los esfuerzos deben centrarse en reducir las poblaciones y procurar que no aumenten, usando para ello estrategias diversas.

Depredadores naturales

Utilizar depredadores naturales como pájaros insectívoros puede ayudar a reducir las poblaciones de Carpocapsa. Sin embargo, este método puede no ser completamente efectivo, ya que la mayoría de la mortalidad se produce una vez que la larva ha abandonado el fruto.

Feromonas de confusión sexual

La confusión sexual es otra forma de luchar contra esta plaga, que consiste en crear artificialmente una nube de feromonas femeninas específicas de la Carpocapsa que impiden a los machos encontrar a las hembras. De esta forma se evita el apareamiento y, por lo tanto, la puesta de huevos y el nacimiento de las larvas. Para lograr la máxima efectividad, los difusores de confusión sexual se colocan antes que empiece el vuelo de la primera generación.

Pieza de Cidetrak CM Meso en árbol

Tratamientos Bio-racionales de Certis Belchim contra Carpocapsa

En Certis Belchim, ofrecemos soluciones Bio-racionales como Cidetrak® CM y Cidetrak® CM MESO, difusores que contienen feromona para la confusión sexual de Carpocapsa (Cydia pomonella). Ambos productos tienen una colocación muy cómoda necesitando en el caso de Cidetrak CM Meso tan solo 100 difusores por hectárea, lo que supone un ahorro importante de mano de obra empleada para su colocación, ideal para fincas grandes.

Su liberación es regular y homogénea durante 180 días. Son herramientas imprescindibles en la estrategia de control de Carpocapsa, tanto en manzano como en peral y nogal.

Quizá te interese este vídeo explicativo de CIDETRAK® CM MESO, donde se incluyen testimonios de personas que lo han usado en sus fincas.

Mimic® potente insecticida destinado al control de Carpocapsa y Capua

Mimic® (Tebufenocida 24%) es insecticida convencional específico para el control de lepidópteros. Actúa principalmente por ingestión como acelerador de la muda. Al ser un IGR, posee efecto colateral sobre la fase larvaria de otras especies distintas de lepidópteros, como los dípteros. Es recomendable su aplicación a partir de las primeras capturas de la primera generación de Carpocapsa.

El control integrado de la Carpocapsa requiere una combinación de estrategias que incluyan métodos biológicos, feromonas de confusión sexual y tratamientos Bio-racionales y convencionales. En Certis Belchim, estamos comprometidos con el desarrollo de soluciones efectivas y sostenibles para ayudar a los agricultores a proteger sus cultivos de esta importante plaga.

Para obtener más información sobre nuestras soluciones para el control de Carpocapsa, no dudes en consultar a nuestro departamento técnico o visite nuestra página web.

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