Tri-soil® y sus aplicaciones en cucurbitáceas
Tri-Soil® es un fungicida biológico formulado a base de esporas de Trichoderma atroviride cepa I-1237. Este es un hongo antagonista con amplio rango de acción frente a los principales hongos patógenos de suelo en diferentes cultivos de hortalizas y cultivos florales.
Registrado como fitosanitario por el Ministerio de Agricultura con el número ES-01152. Cuenta con múltiples usos y, tras la última ampliación de etiqueta a cultivos menores, se incluyen las aplicaciones en distintas cucurbitáceas como pepino, pepinillo y calabaza frente a Fusarium y Pythium.
Tri-soil® es un producto de la gama de Bio-racionales de Certis Belchim y se encuentra certificado en agricultura ecológica.
T. atroviride cepa I-1237 pertenece al grupo BM02 del Comité de Acción contra la Resistencia a Fungicidas (FRAC), donde se incluyen aquellas materias activas biológicas (microbianas) con múltiples modos de acción y no se conocen resistencias.
La cepa I-1237 ha sido seleccionada por su virulencia, amplio espectro, capacidad de crecimiento incluso en condiciones de baja temperatura y adaptabilidad a distintos pH. En la figura 1 se observa en detalle el aspecto del micelio desarrollado de Tri-Soil®.
Modos de acción
Entre los modos de acción de Tri-Soil® destacan la competencia por el espacio y nutrientes frente a los hongos patógenos de suelo, antibiosis y micoparasitismo, además de solubilizar los nutrientes presentes en la rizosfera y promover el desarrollo radicular.
Tri-Soil® es capaz de inducir resistencias en las plantas y aumentar el vigor y el rendimiento de las mismas. Todos estos modos de acción han sido trabajados por Certis Belchim, corroborando el gran potencial de la cepa I-1237.
Figura 1. Detalle del micelio establecido de Tri-Soil®
Experiencias con Tri-soil® en pepino frente a Pythium
La eficacia del producto ha sido testada en pepino frente a Pythium tal cual se recoge en la experiencia mostrada a continuación testando el efecto de las aplicaciones consecutivas a lo largo del ciclo de cultivo.
En este caso, se procedió con inoculación artificial del patógeno para garantizar no solo su presencia, sino también la homogeneidad de infección en toda la parcela.
En estas condiciones de alta presencia de enfermedad, la aplicación de Tri-Soil® se realizó a través del sistema de riego por goteo. La dosis final acumulada de 5 Kg/ha se alcanzó tras 4 aplicaciones consecutivas (espaciadas 14 días), la primera vez en el momento del trasplante a 2 Kg/ha y las otras 3 aplicaciones restantes a 1 Kg/ha.
Resultados
Los resultados obtenidos respecto a la incidencia y a la severidad de la enfermedad (figura 2) muestran la eficacia de Tri-Soil® frente a dos referencias de mercado (biológica y química). Las referencias seleccionadas fueron aplicadas tal cual se recoge en su registro y Tri-Soil® obtiene eficacias superiores que se reflejan, en última instancia, en los valores de producción.
En este caso, las producciones están referidas en % donde el 100% lo marca el testigo no tratado (figura 3).
Con todo ello, el registro de Tri-Soil® obtenido en las cucurbitáceas incluidas en el listado de cultivo menor, ofrece una potente herramienta de control frente a patógenos del suelo, pudiéndose aplicar a una dosis total de 5 Kg/ha y a través del sistema del riego por goteo, garantizando una adecuada instalación de la cepa I-1237 en la rizosfera.
Figura 2. Resultado de eficacia de Tri-soil® tras las aplicaciones en pepino vs Pyhtium
Figura 3. Producciones finales obtenidas tras los tratamientos de Tri-soil® en pepino.
Si tienes dudas sobre cuál es el mejor producto para proteger tus cultivos, ponte en contacto con nuestro equipo de Certis Belchim a través de este formulario. Te asesoraremos y ayudaremos a encontrar el tratamiento que mejor se adapte a tus necesidades.
Artículo realizado por Maria Jesús Zanón, Devolopment Manager en Certis Belchim
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